Soy Patricio, un hombre ya adulto que no se atrevía a enfrentar sus temores más internos, y que durante años se negaba a recibir ayuda.
El haber transitado este sendero de revelaciones, de miradas distintas, de dolor y encuentro junto a María José, me ha ayudado a sanarme y entender muchas situaciones, y conductas que antes no me era posible aceptarlas ni entenderlas.
Seguramente como a mí me ha ocurrido, posiblemente a cualquiera que necesite ayuda, una guía para lograr entender y sanar situaciones que solo nos es imposible, creo que este es el camino correcto.
Les deseo logren encontrar y disfrutar este camino que, a pesar de tener piedras y espinas, les recibirá al final con un jardín de paz, tranquilidad y amor en vuestro espíritu.