Como la terapia me hizo libre

Comencé a tomar terapia a fines del 2019 producto de ataques de ansiedad que sufría manejando. Soy sobreviviente a una violación y numerosos episodios de abuso sexual. El transitar por la terapia fue un proceso largo y muy doloroso, pero que al final del recorrido me trajo un alivio y una paz que jamás había sentido, me perdone a mí misma y a los demás.

Hoy soy una mejor persona, mujer, esposa y mamá gracias a la terapia. Soy una mujer que se respeta y valora, aprendí mucho de mí, de mi valentía. Aprendí a conocerme a fondo y no dejar que cosas malas que viví me definieran.

Sigo mensualmente con mi terapia, pero como parte de un camino de autoconocimiento y ya no desde el dolor. Me he liberado desde lo más profundo de mi corazón.

Gracias Efdalma, gracias María José.